Atención al publico, servicio al cliente, organizaciones, empresas, sociedades...realmente hay alguna forma de que estemos satisfechos con ellas?
Cuando acudes a comprar o pagar un servicio / producto, y te encuentras con que te han rechazado el pago, devuelto el pago, negado alternativas de pago o incluso limitado las soluciones para pagar.
Cuando tienes derecho a disfrutar de un servicio o beneficio, pero no te han informado de el, o la información no es clara y transparente, o no ha sido bien divulgada y distribuida... y te enteras tarde o escasamente de lo que te perdiste, de lo que te fue negado, etc...
Cuando observas todo esto y pides información, ayuda, asesoría, o buscas hacer sugerencias, o participar para que el producto mejore, el servicio mejore, y la relación mejore... pero no eres atendido, escuchado, tomado en cuenta, no ves mejoras, no hay cambios, etc...y por ello acudes a algún conocido, amigo, contacto esperando encontrar el trato que mereces, esperando conseguir lo que quieres o simplemente intentando hacer que todo mejore...indudablemente eres testigo de que en verdad no funciona como deseas o que sólo funciona para amigos especiales. Y allí, suceden dos cosas: o te sientes cómodo obteniendo lo que tu querías sin importar que toda la cadena de atención y servicio no te haya sido útil...o te decepciones y preocupas por descubrir que sólo tú suerte podía favorecer tus necesidades de atención y soluciones en esa organización (Solo si te llama el bien común, estarás pensando como colectivo; pero si piensas solo en ti mism@, satisfacer tus solicitudes será lo único que te importe. )
A quien le debe interesar entonces la oferta de esa empresa, y el producto y servicio ofrecido al publico? La respuesta obvia es que a la misma empresa, organización o prestador de servicio, pero ciertamente debería interesar a todos los que participan de ella, y en efecto así es: Los que se quejan, los que piensan en sí mismos, los que piensan en colectivo, los que constituyeron la empresa, los que dan la cara por ella, los que participan de toda la dinámica de atención, consumo, compra/venta, mejora, etc... están dentro del mismo sistema, en el mismo barco, e igualmente implicados en el resultado. Si a nadie le importara, estaría abandonada, se deterioraría y simplemente dejaría de existir
Entonces, quien debe poner de su parte? Sobre quien recae la responsabilidad? Quien tiene la solución?
Para estas preguntas ya habrá muchas posiciones firmes y señalamientos y emociones, pero aun si la responsabilidad obvia es de uno, el interés es de todos. Es una cadena, una dinámica, donde todos deberían reconocer que su posición, punto de vista y acciones, tienen una vía útil y provechosa para el bien común, todos debería saber que desde ese rol, posición, alcance y confianza que asumimos, podemos aportar lo que necesita el sistema para ajustarse a las necesidades del todo.
Para estas preguntas ya habrá muchas posiciones firmes y señalamientos y emociones, pero aun si la responsabilidad obvia es de uno, el interés es de todos. Es una cadena, una dinámica, donde todos deberían reconocer que su posición, punto de vista y acciones, tienen una vía útil y provechosa para el bien común, todos debería saber que desde ese rol, posición, alcance y confianza que asumimos, podemos aportar lo que necesita el sistema para ajustarse a las necesidades del todo.
Si no damos lo mejor de nosotros mismos justo allí donde estamos, como vamos a constituir un óptimo aporte a ese todo del cual formamos parte? Así de importantes somos, desde esa confianza podemos comprometernos con la atención que merecemos recibir y la realidad de la que somos parte. Depender de un culpable o de un solucionador, no es la única manera de sentirnos a gusto, satisfechos, encaminados, bien atendidos... también podemos sentirnos orgullosos y satisfechos de nuestra propia actuación, actitud, participación y contribución.
Puedes ver ese poder en ti? :)
Jhozo
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